La banda de nueve hombres del Lazio supera a Viktoria Plze en un thriller

En un mundo donde los partidos de fútbol a veces se asemejan al acto final de una obra de Shakespeare, el partido entre el FC Viktoria Plze y Lazio en la UEFA Europa League fue nada menos que un espectáculo dramático. El 6 de marzo de 2025, bajo las luces del Estadio Struncovy Sady y frente a 11,236 ardientes aficionados, Lazio logró una victoria de 2-1, a pesar de tener menos jugadores en el campo que una típica boy band.

El juego comenzó con Alessio Romagnoli canalizando su superhéroe interior, saltando como Spider-Man para cabecear el balón a casa en el minuto 18, dando a Lazio una ventaja temprana. El cabezazo de Romagnoli no solo abrió el marcador, sino que también desató una noche de acción ininterrumpida. Viktoria Plze, sin embargo, no iba a interpretar el papel de la damisela en apuros. Respondieron en el minuto 53 cuando Rafiu Durosinmi, con la finura de un bailarín de ballet, encontró la red para igualar el marcador.

Ahora, si alguna vez has visto una comedia romántica, sabes que las cosas pueden volverse de dulces a amargas más rápido de lo que puedes decir "meet-cute". Para Lazio, la noche dio un giro cuando Samuel Gigot y Nicol Rovella fueron mostrados tarjetas rojas, reduciendo su plantilla a nueve. Era como si estuvieran audicionando para un reality show de supervivencia, donde las probabilidades estaban en su contra, pero aún así tenían un as bajo la manga.

Entra Gustav Isaksen en el minuto 98, el hombre con una inclinación por lo dramático. Su gol tardío fue equivalente a un giro argumental de último segundo en una película de M. Night Shyamalan. El estadio estalló—bueno, excepto por los aficionados locales cuyos corazones se hundieron más rápido que el Titanic.

A pesar de estar con nueve hombres, la resiliencia y el ingenio táctico de Lazio brillaron, dejando a Viktoria Plze con más preguntas que respuestas. El partido tuvo todo lo que un aficionado al fútbol podría pedir: goles, tensión y el siempre controvertido VAR, que se aseguró de mantener su racha como el "jugador" más comentado del campo.

A medida que el polvo se asentó, el partido fue un recordatorio de que en el fútbol, al igual que en la vida, no siempre se trata de tener a todos los jugadores en el campo, sino de saber cómo aprovechar al máximo los que tienes.