La Maestría Táctica del West Ham United Pone Fin a la Racha Sin Victorias en Old Trafford

En un encuentro decisivo el 11 de mayo de 2025, el West Ham United puso fin a su racha de ocho partidos sin ganar con una victoria contra el Manchester United en Old Trafford. Este partido no solo marcó un momento crucial en la temporada del West Ham, sino que también demostró la astucia táctica del entrenador Graham Potter, cujos ajustes estratégicos fueron fundamentales para asegurar la victoria.

El West Ham se alineó en una formación 3-4-2-1, una disposición que les permitió explotar las vulnerabilidades del Manchester United, especialmente dado el reciente cansancio de United por sus compromisos en las semifinales de la Europa League. La línea defensiva estaba compuesta por tres centrales, proporcionando solidez mientras que los carrileros se empujaban hacia arriba en el campo, ofreciendo amplitud y estirando la defensa de United. Esta flexibilidad táctica fue clave para neutralizar las amenazas de ataque del Manchester United.

En el mediocampo, el doble pivote del West Ham actuó como una fuerza estabilizadora, rompiendo el juego de manera efectiva y transitando rápidamente al ataque. Los mediocampistas centrales, hábiles en reciclar la posesión, aseguraron que el West Ham mantuviera el control durante las fases clave del partido. Al desplegar dos mediocampistas ofensivos detrás de un único delantero, el West Ham creó superioridad numérica en las áreas centrales, lo cual fue crucial para desmantelar la defensa de United.

El movimiento fluido de la línea ofensiva del West Ham interrumpió la forma defensiva del Manchester United. El único delantero, apoyado por dos dinámicos mediocampistas ofensivos, intercambiaba frecuentemente posiciones, sacando a los defensores de su posición y creando espacios para carreras incisivas. Este movimiento fue particularmente evidente en la construcción de los goles del West Ham, donde los rápidos intercambios y las carreras decisivas abrieron la línea defensiva de United.

La previsión estratégica de Graham Potter también fue evidente en sus sustituciones. La introducción de piernas frescas en las etapas finales aseguró que el West Ham mantuviera su intensidad, mientras que sutiles cambios tácticos ayudaron a preservar su ventaja. Esta victoria impulsó al West Ham por encima del Manchester United en la clasificación, un testimonio de la eficacia del plan de juego de Potter.

En última instancia, la victoria del West Ham no fue solo un triunfo en el marcador, sino también una exhibición de ingenio táctico. Al aprovechar la flexibilidad de la formación, la posición disciplinada y los movimientos inteligentes de los jugadores, el West Ham superó a un formidable oponente, subrayando su potencial para escalar más en la tabla de la Premier League.