El Resurgir del SD Eibar en la Copa del Rey: Una Victoria Imponente Sobre N xara CD
Una fresca noche de otoño en Haro, enclavada en el corazón de La Rioja, fue testigo de un emocionante enfrentamiento que reavivó el espíritu combativo del SD Eibar. El 29 de octubre de 2025, bajo las luces del Estadio Municipal Luis de la Fuente, Eibar silenció a sus recientes críticos con un triunfo 4-2 sobre un valiente N xara CD en la primera ronda de la Copa del Rey.
Los ecos de las recientes dificultades de Eibar en la liga seguían resonando cuando comenzó el partido, con las cicatrices de un octubre sin victorias proyectando sombras sobre los esfuerzos del equipo vasco. Sin embargo, desde el primer silbato, fue evidente que los hombres de Beñat San José estaban en una misión para reescribir su narrativa. La disposición táctica de Eibar, una clase magistral en la combinación de paciencia con verticalidad incisiva, pronto dio sus frutos.
El primer golpe lo dio Javi Martín, quien aprovechó una exquisita asistencia de Aleix, atravesando la defensa de N xara para reclamar la delantera. La dominación de Eibar era palpable mientras dictaban el ritmo, creando una plétora de oportunidades que mantenían a la defensa de N xara en tensión. Toni Villa y Martín fueron fundamentales, atravesando defensas con toques sutiles y un ritmo implacable, preparando el escenario para que Peru Nolaskoain duplicara la ventaja desde el punto de penalti.
N xara CD, sin embargo, se negó a desvanecerse silenciosamente en la noche, mostrando una tenacidad que les permitió regresar al partido. Sin embargo, la determinación de Eibar nunca flaqueó. Toni Villa, encarnando el espíritu de un verdadero matador, danzó entre defensores para grabar su nombre en el marcador. El gol tardío de Bautista, un remate contundente que selló la victoria, fue un testimonio del rejuvenecimiento de Eibar.
Esta actuación fue un momento crucial para el club, sirviendo como un importante refuerzo de moral tras su anterior empate contra CD Leganés. El triunfo de Eibar no solo aseguró su progreso en la Copa del Rey, sino que también presagiaba un posible punto de inflexión en su temporada. A medida que los aficionados de Eibar abandonaban el estadio, sus ánimos elevados por las hazañas de la noche, había una palpable sensación de optimismo de que las mareas finalmente estaban cambiando para su amado equipo.







