Genoa CFC se separa de Patrick Vieira en medio de una tempestuosa temporada de Serie A

En el corazón de Liguria, ha estallado una tormenta futbolística. Genoa CFC, el club de fútbol profesional más antiguo de Italia, ha separado caminos con el entrenador principal Patrick Vieira tras un inicio sin victorias en la campaña 2025/26 de la Serie A. La decisión, anunciada el 1 de noviembre de 2025, se produce después de que los Rossoblù se encontraran languideciendo en la parte inferior de la tabla de la liga con una mísera suma de tres puntos, todos asegurados a partir de empates en nueve arduas batallas en el campo.

Vieira, una figura imponente en el fútbol mundial conocida por sus hazañas con la selección nacional francesa y el Arsenal, tomó las riendas en Génova en noviembre de 2024. La temporada 2024/25 lo vio alejar al club del precipicio del descenso, terminando en el 13° lugar, un logro encomiable con 8 victorias y 9 empates en 26 partidos. Sin embargo, la temporada actual ha sido menos indulgente. Un récord desalentador de 0 victorias, 3 empates y 6 derrotas subrayó la urgencia del cambio.

La gota que colmó el vaso llegó con una desalentadora derrota 0-2 en casa contra Cremonese el 29 de octubre de 2025. El Estadio Luigi Ferraris, habitualmente un hervidero de ferviente apoyo, resonó con el descontento de los aficionados que expresaron su frustración, aumentando la presión sobre Vieira. Después de esto, Roberto Murgita, junto con Domenico Criscito—una leyenda del club y entrenador de la U-17—fueron encargados del liderazgo interino del primer equipo.

En un comunicado que expresaba gratitud, el club reconoció el profesionalismo de Vieira, pero la escritura estaba en la pared. El despido también siguió a la marcha del director deportivo Marco Ottolini, quien fue relevado de sus funciones el 31 de octubre de 2025. Esto marcó el segundo cambio de entrenador en la Serie A esta semana, tras la decisión de la Juventus de separarse de Igor Tudor.

Genoa CFC ahora emprende la búsqueda de un nuevo entrenador principal permanente, con el objetivo de revitalizar un plantel rico en historia pero actualmente sumido en la incertidumbre. Se anticipa que el período interino bajo Murgita y Criscito estabilice el rumbo antes de que pueda comenzar una nueva era. Mientras los fieles Rossoblù esperan el amanecer de un nuevo liderazgo, los ecos del pasado les recuerdan la resiliencia que es sinónimo de su club legendario.